Vistas de página en total

Vistas de página en el último mes

Vistas de página la semana pasada

sábado, 31 de octubre de 2015

"Criterios diagnósticos para hablar de Depresión"

Según Vallejo  Ruiloba y Leal Cercos en su libro: “Tratado de Psiquiatría” refiere que el diagnóstico de depresión mayor fue establecido por el DSM-III como categoría básica diferencial frente a los trastornos bipolares y otros persistentes como la distimia. En el DSM-III se precisaban 4 síntomas de un grupo de 8, presentes dos semanas como mínimo, para alcanzar la categoría de depresión mayor. En el DSM-III-R, al igual que en el DSM-IV y el DSM-IV-TR, se añade un ítem y se precisan 5 de los 9 para establecer el diagnostico. Además, uno de los síntomas debe ser necesariamente: estado de ánimo depresivo o pérdida de interés o de la capacidad de placer, indiscutible referencia al concepto de anhedonia que Klein estableció con anterioridad en el año 1974. Según el DSM-V para hablar del trastorno depresivo mayor se debe cumplir con los siguientes criterios:

A. Cinco  o más de los síntomas siguientes estando presente durante dos semanas y representan un cambio en el funcionamiento previo; al menos uno de los síntomas es un estado deprimido o perdida de interés o de placer.
  • Estado de ánimo deprimido la mayor parte del día, casi todos los días, según se desprende de la información subjetiva o de la observación por parte de otras personas.
  • Disminución  importante del interés o del placer por todas  o casi todas las actividades la mayor parte del día, casi todos los días.
  • Pérdida importante de peso sin hacer dieta o aumento de peso o disminución o aumento del apetito casi todos los días.
  • Insomnio o hipersomnia casi todos los días.
  • Agitación o retraso psicomotor casi todos los días.
  • Fatiga o perdida de energía casi todos los días.
  • Sentimiento de inutilidad o culpabilidad excesiva o inapropiada casi todos los días.
  • Disminución de la capacidad para pensar o  concentrarse, o para tomar decisiones, casi todos los días.
  • Pensamientos de muerte recurrentes, ideas suicidas recurrentes sin un plan determinado, intento de suicidio o un plan específico para llevarlo a cabo.
B.  Los síntomas causan malestar clínicamente significativo o 
deterioro en lo social, laboral u otras áreas importantes del funcionamiento.

C.  El episodio no se puede atribuir a los efectos fisiológicos de una sustancia o de otra afección médica.

Publicado: Dr. Arnulfo V. Mateo Mateo

No hay comentarios:

Publicar un comentario