Autores: Daniel Silva N. , Benjamín Vicente P. y Mario Valdivia P.
El comportamiento suicida, entendido como un continuo que va desde la concepción hasta el suicidio consumado, a través del intento de suicidio, es un problema de salud importante en todo el mundo, tanto en población adulta y adolescente. El trastorno depresivo mayor es consistentemente el trastorno más frecuente entre las personas que se suicidan y una de las principales causas de discapacidad en todo el mundo. El factor neurotrófico derivado del cerebro (BDNF) parece ser un sustrato molecular de estrés, porque su expresión se reduce en estas condiciones que sería un importante factor de riesgo para la depresión. Además, el tratamiento antidepresivo tiene efectos sobre los niveles de BDNF opuestas a las de estrés o depresión. Estudios postmortem han demostrado que la expresión de ARNm y proteínas niveles de BDNF tendieron a reducirse significativamente en los cerebros de las personas que se han suicidado independiente de los trastornos psiquiátricos, principalmente en la corteza prefrontal y el hipocampo. Por otra parte los estudios clínicos han mostrado una menor presencia de suero BDNF en los pacientes deprimidos que han intentado suicidarse en comparación con los controles sanos. Con el fin de separar la posible contaminación que pueda existir entre la depresión y la conducta suicida, este artículo revisa la evidencia existente sobre los niveles y la expresión de BDNF en las poblaciones deprimidas con y sin intentos de suicidio.
Fuente: Revista Chilena Neuro-Psiquiatría 2015; 53 (1): 44-52.
Publicado: Dr. Arnulfo V. Mateo Mateo